Y tú, ¿has oído hablar alguna vez de los ventiladores de las chimeneas? Una chimenea con ventilación ayuda a repartir de forma más homogénea el calor en las estancias. Es por ello por lo que cada son cada vez más las personas que optan por comprar modelos de chimenea con ventiladores. Pero ¿qué son los ventiladores de la chimenea y cuál es exactamente su función? A continuación, te explicamos todo lo que necesitas saber sobre ellos.
¿Qué son los ventiladores de una chimenea?
Los ventiladores de una chimenea van instalados en la zona de convección de la chimenea, calentando el aire frío de la vivienda a la circular alrededor de la cámara. De este modo se va caldeando y aportando calor a la vivienda.
Generalmente, los ventiladores se incluyen en las chimeneas de tipo cassette o insertables, y se pueden poner en marcha de forma automática o manual.
¿Para qué sirven los ventiladores de la chimenea?
La funcionalidad de los ventiladores en una chimenea es hacer circular el aire caliente por la estancia,
distribuyendo de forma más rápida y eficaz el calor.
Del mismo modo los ventiladores ayudan a caldera estancias cercanas si se canalizan.
Conoce algunos tipos de ventiladores de chimenea
Ahora que ya conoces la importancia de los ventiladores de la chimenea y para qué sirve exactamente, debes saber que hay varios tipos de ventiladores que puedes escoger en función de lo que necesites. En los modelos Carbel hay dos tipos de ventiladores que son los más comunes:
- Ventiladores axiales con interruptor. Estos ventiladores mueven un caudal de 360m3 la hora o 720m3 la hora, en función de si llevan dos o cuatro ventiladores. Disponen de interruptor de 3 posiciones: velocidad mínima, modo automático y velocidad máxima. Por último, el modo automático de la ventilación se activa cuando el termostato detecta una temperatura igual o superior a los 45ºC.
- Ventilador centrifugo con centralita y mando a distancia. Gracias a la instalación de la centralita se puede controlar la velocidad de la turbina, además de pasar fácilmente de un modo manual a uno automático. Como en el caso anterior, el modo automático se pone en marcha cuando la temperatura iguala o supera los 45ºC. Por último, el mando a distancia te ayudará a controlar de forma remota las diferentes opciones.
Como ves, la función del ventilador de chimenea es fundamental para asegurar un buen reparto de la calefacción y garantizar un uso correcto de la chimenea.