¿A quién no le gusta el pan? La combinación de su aroma con su sabor y el sonido de la corteza cuando cruje nos hace la boca agua. No hay nada mejor que comprar una buena barra para hacer bocadillos, tostadas, tapas… salvo preparar tu propio pan en tu estufa con horno.

Las estufas con horno son una de las grandes opciones que tienes a tu disposición para cocinar. Dependiendo del tipo de modelo que tengas en tu hogar la capacidad de tu horno puede ser bastante grande, por lo que podrás llegar a hacer varias remesas de pan a la vez. Pero no solo por su amplia capacidad destacan las estufas con horno. De normal, cuentan con un sistema fácil de limpieza así que si te da miedo ensuciar el espacio del horno de tu estufa, no te preocupes, podrás desmontarlo fácilmente para conseguir una limpieza correcta. Por último, mencionar que el revestimiento del horno es de acero inoxidable con base de refractario y termómetro, lo que permite mejorar el funcionamiento y el rendimiento energético.

Visto todo esto, si quieres sacarle partido a tu estufa con horno y aprender elaborar pan casero con el sabor único del fuego a leña, sigue leyendo. Tenemos la receta perfecta ¡y el resultado de sorprenderá!

Pasos para hacer pan casero en tu estufa con horno

Preparar pan casero con tu estufa con horno es muy fácil. Una vez que la pruebes ¡no podrás resistirte a probar otras recetas para estufas con horno! Para empezar, necesitarás los siguientes ingredientes:

  • 600 gramos de harina de trigo
  • 400 gramos de harina de fuerza
  • 450 mililitros de agua templada
  • 20 gramos de levadura
  • Media cucharadita de sal

A continuación, solo tienes que seguir estos pasos:

  1. Mezcla en un bol las dos harinas, tamizándolas para que no se formen grumos, con la sal. Después añádele la levadura y mezcla de nuevo.
  2. Abre un espacio en el medio de la mezcla y comienza a añadir el agua lentamente mientras sigues mezclando con unas varillas o con la batidora, hasta que se forme la masa. Si ves que se queda muy seca, añade más agua, y se queda demasiado líquida, pon más harina.
  3. Llegó el momento de sacar el panadero que llevas dentro para amasar el pan: para ello, échale un poco de harina por encima a la masa y trabájala con las manos durante unos diez minutos. Cuando termines conviértela en una bola, cúbrela con un paño húmedo y déjala fermentar durante una hora. Después repite el proceso: amasa diez minutos y deja fermentar una hora.
  4. ¡Hora de meter el pan en el horno de tu estufa! Asegúrate de que está bien caliente y, simplemente, mete la masa y déjala dentro treinta minutos.
  5. Ahora llega la mejor parte: sacar el pan, dejarlo reposar y decidir cómo te lo vas a comer.

Con esta receta conseguirás un resultado delicioso y le sacarás todo el provecho a tu estufa con horno. ¿A qué esperas para probarla? ¡Es pan comido!