Uno de los miedos más frecuentes a la hora de pensar si queremos instalar una chimenea en nuestra casa es saber si estas van a producir olor y/o humos en nuestro hogar.
Si tú también te has preguntado esto en alguna ocasión, tranquilo, no eres el único. En el siguiente post te damos la respuesta para que puedas disfrutar de tu chimenea sin olor.
¿Es posible tener chimenea sin olor?
La respuesta es sí y esto es gracias a las chimeneas cerradas como las que tenemos en Carbel. Este tipo de chimeneas nunca dejan pasar el humo de la cámara de combustión a tu hogar, por lo que el miedo de que tu casa huela a humo desaparece de un plumazo.
No obstante, si en tu casa tienes una chimenea abierta, es decir, sin cristales, y esta es muy antigua, es posible que el humo pueda filtrarse en tu estancia más fácilmente.
Sea como sea, tienes que seguir una serie de consejos para evitar que el olor a humo se apodere de tu casa.
- Realiza una limpieza de la salida de humos, tanto si tu chimenea está cerrada como abierta. Antes de que empiece la temporada de frío, lo ideal es recurrir a un especialista que revise que la salida de humos está en perfecto estado y no hay nada que entorpezca la salida de este. Realizar esta acción te ayudará a mantener el tiro limpio y a evitar que el humo no se canalice bien. Además de por temas de olores, es importante que esta acción la lleve a cabo un profesional para conseguir una chimenea segura.
- Utiliza leña que esté correctamente secada. La leña húmeda tiende a producir mucho humo, así que asegúrate de que la que usas para quemar ha pasado un correcto proceso de secado. En el siguiente post puedes aprender más información sobre el secado de leña. Además, asegúrate de que la leña no tiene restos de animales ya que, al quemarla, puede producir olores desagradables.
Ahora ya sabes, si tu chimenea es cerrada evitaras la propagación de humo y olor a la vivienda, así que fuera miedos y deja que tu comedor esté coronado por una chimenea cerrada.
Así disfrutarás del calor natural del fuego