El triatlón no cuenta con mucha tradición en comparación con otros deportes. Sin embargo, no podemos discutir el crecimiento exponencial que está teniendo en los últimos años. Las licencias en España crecen a un ritmo de un 15% anual.
Lo que empezó siendo un deporte para superhombres, como un reto entre marines, ha ido adaptándose para llegar a todo el mundo. Sus diferentes distancias y modalidades lo hacen accesible a casi cualquier público.
En este bárbaro deporte se sumergió, David Castro, extriatleta profesional y ahora entrenador y director Técnico de la Escuela David Castro de Triatlón.
A la temprana edad de 15 años, se vio enganchado a un nuevo deporte que conoció por casualidad en su barrio natal de La Coruña. 25 años después, David Castro recoge un palmarés hegemónico.
25 años viviendo y disfrutando el triatlón donde lo ha conquistado casi todo a nivel nacional. Sin embargo, pese a todas las victorias, recuerda con especial emoción la competición que ganó pasando por meta con su hijo en brazos aun siendo bebe.
Sin embargo, hoy en día Castro lleva unos años fuera de la alta competición. Aun así, sigue entrenando y compitiendo, pero más a nivel amateur. Ahora las prioridades son otras.
David Castro, referente para los más jóvenes
Actualmente David Castro está al 100% con sus proyectos de escuelas (Trisinfronteras y la Escuela de Triatlón de El Molar). Para entender mejor esta nueva etapa en su vida deportiva David Castro contesta a nuestras preguntas, y aquí están sus respuestas.
¿Qué te animó a involucrarte en la escuela de triatlón?
David Castro: Creo que el triatlón es un deporte que encaja perfectamente como una actividad para niños. Tenemos la idea o la imagen de deporte duro, para superhombres… Y no es así, puede ser una actividad lúdica/deportiva ideal para los niños. Vivimos en una sociedad muy sedentaria, y ahí es donde estos deportes juegan un papel muy importante.
¿Cuál es el objetivo de esta escuela?
DC: Llevo 3 años desde la creación de la escuela y cuento con casi 100 niños/as, desde los 7-8 años hasta los 16-17 años. El principal objetivo es que los niños disfruten, aprendan y los que quieran compitan.
¿Qué destacas de este proyecto?
DC: Este proyecto no seria posible sin el apoyo y ayuda de la empresa Lidersport (gestionadora del centro deportivo donde entrenamos) desde el principio han confiado en el proyecto y tiene claro que el triatlón es un deporte con proyección.
También, hemos visto que cuenta con un club de triatlón. ¿Nos podrías contar el porqué de su aparición y cuál es su finalidad?
DC: El club nace para dar la posibilidad a la gente de poder competir y tener un grupo donde verse representado. Contamos con gente de toda España e incluso del extranjero. Es el núcleo.
¿Cómo se financian todos estos proyectos?
DC: Por suerte, contamos con la ayuda, de varias empresas, Mercedes-Benz, Grupo Mecha y Carbel. Desde aquí mi más sincero agradecimiento. Son tiempos difíciles y cualquier ayuda supone un sacrifico.
¿Qué significa para ti y para la escuela que pequeñas y medianas empresas sean vuestros sponsors?
DC: Una ayuda muy grande para apoyar este deporte.
¿Por qué crees que es tan difícil conseguir patrocinadores en España?
DC: Quizás por como repercuten esas ayudas a nivel fiscal, hay una ley de mecenazgo muy poco atractiva para las empresas.
Hablando con perspectivas de futuro, ¿qué esperas para la escuela?
DC: Que siga creciendo, pero en diferentes centros deportivos, seguir dando a conocer este deporte a nivel escolar sería el objetivo.
¿Y a nivel individual?
DC: Soy un privilegiado, así que, seguir trabajando y enseñando triatlón.
Desde Carbel, confiamos plenamente en que David pueda llevar a cabo todos estos objetivos por eso contribuimos al crecimiento de la Escuela Triatlón. Donde el sacrificio y la ilusión se juntan para potenciar este deporte entre los más jóvenes Enhorabuena David.